Desde mediados del los anos noventa del siglo pasado se produjo en el futbol ecuatoriano el surgimiento de nuevas barras organizadas tales como ‘la muerta blanca’, ‘la sur oscura’, ‘marea roja’, entre otras, que aparte de alentar a sus respectivos clubes, puso nuevamente en el tapete el historico tema de la ‘cuestion regional’ y la biopolaridad politica, economica y urbana entre las dos principales ciudades del Ecuador: Quito y Guayaquil. Este articulo analiza esta problematica y cuestiona la mirada oficial que estigmatiza a las hinchadas sobredimensionando el tema de la violencia descolocando los temas locales, regionales y nacionales que nos permiten entender la dinamica de los hinchas, sus practicas y la violencia.